viernes, 8 de octubre de 2010

Fuera de mi vida monotonía.

Todos los días son una constante rutina, aburrida, predecible y sin sentido. Los días de riesgo, descanso y diversión se extinguieron y dieron lugar a días tan pesados como ostinantes e insoportables. Los días diferentes, nuevos y coloridos donde podías hacer lo que fuese y en donde eras libre se acabaron, ahora todos los días son iguales, siempre siguen los mismos patrones ordinarios y agotadores. Ahora hay que acostumbrarse y adaptarse a la rutina que nos persigue día a día, que le quita el sentido y lo emocionante a la vida, en cambio en aquellos días locos de desvelarse, salir, conocer, experimentar, pensar, divertirse y relajarse no te tenías que adaptar a nada ni acostumbrarte, sólo vivir y disfrutar del presente  sin saber con exactitud que ocurriría mañana, con esa intriga, esa emoción, esa curiosidad. Ya, al contrario de vaciar la mente, estaremos obligados a llenarla de conocimiento absurdo e inútil, aunque aveces ( pocas ocasiones) algo interesantes. Y es que las rutinas no tienen que ser tan aburridas y repetitivas, hay que agregarles diversión para que el conocimiento se vuelva algo más entretenido e interesante y no un simple deber que hacemos por hacer, aunque no queramos, así los días tal vez sean algo diferentes y más parecidos a aquellos días de sosiego, alegría y placer que tanto nos gustaban.
Hay que dejar de ser peresozos y que la vida sea impredecible por si sóla, que los momentos espontáneos sucedan, porque no siempre vendran, la vida dejara de sorprenderte y tu te tendrás que encargar de hacer cada día único y nuevo, debemos poner de nuestra parte para que los momentos sean más alegres, debido a que de no ser  así caeremos en la monotonía de una manera tan fatal que ya no podremos salir.

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